Uno de los colaboradores más cercanos del Papa Francisco y miembro del C9, una especie de consejo de la Corona, ha grabado un largo video para decir que nunca ha abusado de nadie y nunca ha tenido comportamientos inapropiados hacia nadie. A la espera de que se abra el juicio civil, el cardenal canadiense Gerald Cyprien Lacroix, de 66 años, se ha auto suspendido temporalmente de todos los cargos y ha rechazado con fuerza todas las acusaciones de violencia sexual. «Hasta donde yo sé, nunca he hecho gestos inapropiados hacia nadie, sean menores o adultos. Afrontaré cada paso legal con un alma pura y una conciencia tranquila», dijo el arzobispo de Quebec en un videomensaje publicado en el sitio web de la archidiócesis el martes. «Es una oportunidad, como arzobispo de Quebec, para reiterar que siempre estamos a favor de las víctimas, y agradezco a todos los que han mostrado su solidaridad. Mi consuelo está en Dios que nunca nos abandona».
La semana pasada, los medios canadienses informaron que se había presentado una denuncia contra Lacroix. Se alega que el hombre tocó y molestó a una chica de 17 años durante dos encuentros religiosos entre 1987 y 1988. El nombre de Lacroix aparece en los documentos judiciales como parte de una gran demanda colectiva, una especie de acción de clase contra la Iglesia católica, junto con decenas de otros nombres. La archidiócesis, al igual que otras voces católicas que intervinieron para calmar las cosas, aseguró que seguirá colaborando e investigando los casos de abuso ocurridos en el pasado, también estudiando formas de compensación para las víctimas.
La archidiócesis ya había declarado el fin de semana que el cardenal inicialmente suspendería sus funciones. Lacroix lo confirmó en su mensaje, enfatizando que no es en absoluto una renuncia, sino «una retirada temporal para poder preparar mejor los próximos pasos y las decisiones necesarias». Algo similar a lo que ocurrió en su momento con otro cardenal, George Pell, quien renunció a todos sus cargos para enfrentar un largo juicio por pedofilia del que fue completamente absuelto en Australia, en última instancia.
Lacroix fue creado cardenal por Francisco en 2014 y fue él quien lo recibió en su viaje a Canadá hace dos años. Mientras tanto, otro cardenal canadiense, Marc Ouellet, considerado papable durante el cónclave de 2013, ha sido golpeado por acusaciones similares. También en este caso, Ouellet niega cualquier tipo de implicación en espera de que la justicia canadiense proceda a esclarecer los hechos.
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