Despido sin justa causa, una monja demanda al Vaticano

Despido sin justa causa, una monja demanda al Vaticano
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martes 16 abril 2024, 06:52 - Última actualización: 13:11

Despido sin justa causa, una empleada demanda a la empresa. Nada particularmente inusual, si no fuera porque la protagonista del caso judicial es una monja y el empleador es el Vaticano. La protagonista de este caso es Madre Marie Ferréol.

Monja despedida, la historia

 

La decisión de tratar el caso como un despido común y llevarlo ante un tribunal civil ha generado una considerable controversia en Francia, donde Madre Marie Ferréol fue apartada después de 34 años en un monasterio en Bretaña, y provocado una fuerte reacción por parte de la Santa Sede, que envió una «nota verbal» a la embajada de París ante el Vaticano, expresando preocupación por el «riesgo de una grave violación de los derechos fundamentales a la libertad religiosa y a la libertad de asociación de los fieles católicos».

Madre Marie Ferréol, de 57 años, fue expulsada del Instituto de las Dominicas del Espíritu Santo en Berné en octubre de 2020, después de 34 años en la comunidad, a raíz de una "visita apostólica" realizada por el cardenal canadiense Marc Ouellet. La exmonja, en el mundo Sabine de la Valette, desde que fue expulsada, vive gracias al "Revenu de Solidarité Active", un ingreso mínimo garantizado por el Estado francés.

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El tribunal condenó a la asociación sindical de la comunidad a pagar 33.622 euros por deber de asistencia y ordenó una compensación de 182.400 euros por daños materiales más 10.000 euros por daños morales, involucrando también al cardenal Ouellet y otros dos visitantes apostólicos. Según el abogado de los inspectores vaticanos, el tribunal «no tenía derecho de acceso al expediente en materia canónica», ya que se trata de un asunto interno de la Iglesia.

LA RESPUESTA DEL VATICANO

La Santa Sede, a través del portavoz Matteo Bruni, ha subrayado que se enteró de la «presunta sentencia» solo a través de la prensa y ha reafirmado que el cardenal Ouellet «no ha recibido ninguna orden de citación». Bruni confirmó que «el cardenal efectivamente realizó una visita apostólica al Instituto de las Dominicas del Espíritu Santo, en cumplimiento de un mandato pontificio» y que «al concluir dicha visita, se adoptaron una serie de medidas canónicas contra la Señora Sabine de la Valette, incluida su destitución del instituto religioso». La nota verbal de la Santa Sede concluye enfatizando que «una posible sentencia del Tribunal de Lorient podría haber planteado no solo cuestiones relevantes que conciernen a la inmunidad sino que, en caso de haberse pronunciado sobre la disciplina interna y la pertenencia a un instituto religioso, podría haber constituido una grave violación de los derechos fundamentales a la libertad religiosa y a la libertad de asociación de los fieles católicos».

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