Angelo Duro: El orgullo de ser antipático y su experiencia en Sanremo

Angelo Duro: El orgullo de ser antipático y su experiencia en Sanremo
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martes 6 febrero 2024, 09:42

«Me enorgullezco de ser antipático. Porque no hay nada peor que alguien que intenta ser simpático. La simpatía no existe. Los simpáticos son unos grandísimos est... que aún no han salido del armario. Se esconden». Así se presenta Angelo Duro al Corriere della Sera, destacando su forma de ser (y/o aparentar). Como en el caso de su aparición en el Festival de Sanremo, hace un año.

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Angelo Duro y la antipatía

«Un recuerdo terrible. Verdaderamente terrible. Esperaba que la audiencia me recibiera con mucho más frialdad. Pero no. Por momentos hubo algo de calor. También recibí aplausos. Un verdadero asco. Fui allí para recibir abucheos y en cambio, ni siquiera por...». Sigue siendo un personaje incluso en la entrevista. Nunca se abre, interpreta un papel: «Era el sueño de mi vida - continúa Duro, descubierto por Davide Parenti en Le Iene - Ir allí y congelarlos, pero nada. No estuve a la altura de aquellos que, en años pasados, realmente recibieron abucheos. No deseados. Yo, que los quería, no los recibí. Un verdadero asco. Creo que no volveré».

Las palabras de Duro

No escatima en ser políticamente incorrecto: «Yo alivio las molestias. Porque hablo de todo, sin pelos en la lengua. Los que las alimentan, las molestias, son los que las esconden, es decir, los buenistas. Y los moralistas. Que son la categoría que más amo en absoluto. Gracias a ellos hago todos estos números en el teatro. Porque se enfadan por lo que digo y me hacen vender más entradas. Así que realmente siento afecto por estos tontos. Porque inconscientemente me han hecho una persona rica».

Vida privada. Duro revela que estuvo enamorado: «Ahora ya no. Porque cuando amas demasiado te vuelves posesivo. Y la posesividad es uno de los terribles comportamientos del machismo. Ella me busca y yo la rechazo. Ella me llama cuando estoy fuera y yo no le respondo. Ella me pide un favor y yo la mando... Desde que la trato así nuestra relación ha empeorado, pero está libre de machismo y posesividad. Y eso es importante». 

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